DARÍO, ‘BAÑADO’ POR EL BEISBOL DESDE LA CUNA

Al igual que a sus hermanos mayores David y Daniel, a Darío, el menor de tres hijos fruto del matrimonio conformado por Connie Acosta y David Gardea padre, el ‘rey de los deportes’ les viene de sangre, como herencia y es parte vital en su ADN, dada la marcada influencia que tiene el beisbol en su familia, especialmente por el lado paterno.

Constantino Gardea Sr. quien militó en el beisbol regional de la Cuarta Zona con el ‘Volcán’ de la Sección 11 de Santa Bárbara, en la década de los ochenta y sus hijos, así como los hermanos Hugo y Diego Gutiérrez Gardea, integrantes de una importante generación de campeones con los Mineros de Parral, son sus parientes.

“Por parte de mi papá toda mi familia está ‘bañada’ en beisbol, es de Parral y todos los Gardea de allá de Parral son una dinastía beisbolera. Se puede decir que todos los Gardea de allá son parientes”, declaró.

Con este fuerte vínculo con la ‘pelota caliente’ como antecedente, aunado a que su papá y sus hermanos también practicaron este deporte, Darío nació y creció en un entorno familiar donde el beisbol es un elemento fundamental en la vida cotidiana de sus integrantes, algo así como el pan de todos los días que alimenta el espíritu de cada uno de ellos.

Inclusive, su hermano David fue compañero en la Liga Norte de México -antes Liga Norte de Sonora- y es amigo personal del ex-big leaguer Héctor Velázquez, campeón con Medias Rojas de Boston en la Serie Mundial 2018, quien abrió dos juegos con Indios de Juárez esta campaña en el beisbol estatal.

“Desde pequeño, en la casa, puro beisbol, puro beisbol y toda la semana nos manteníamos en las ligas, jugando, entrenando, todo el tiempo era puro beisbol”, recordó el medallista de bronce en la Olimpiada Nacional 2013 con los Doraditos de Chihuahua

Relevista de Indios de Ciudad Juárez, de 25 años y 1.90 metros, líder en el equipo en el departamento de rescates con tres, el lanzador derecho recordó aquellas sabrosas tardes donde en familia, los cuatro ‘Hombres D’ -David Papá e hijo, Daniel y Darío- veían los juegos por la televisión.

“Todas las tardes con mi papá, ponernos a ver los juegos de los Yanquis, de Boston, de los Dodgers, de todas las tardes”, expuso el seleccionado nacional en el Campeonato Mundial Sub-18, en Thunder Bay, Canadá, en 2017.

LIGA BASASEACHIC, EL INICIO DEL CAMINO

Meses después que aprendió a caminar, a los tres años, Darío inició su carrera en el beisbol en la Liga Infantil Basaseachic de esta ciudad, en la categoría Pañalitos.

Justo ahí, su sueño de jugar beisbol y de disfrutar al máximo cada momento dentro del terreno de juego, comenzó a materializarse.

“Es mi sueño, siempre ha sido mi sueño jugar beisbol. Gracias a Dios jugué a un nivel alto. Más que nada, es un sueño que tuve desde niño. Es mi trabajo, pero nunca lo he mirado como un trabajo, siempre como algo que disfruto”, destacó.

De ahí, ente los siete y ocho años, pasó a la Liga Infantil Niños Héroes donde cumplió su etapa como pelotero Infantil y Juvenil hasta los 15 años.

LA FIRMA CON TIGRES, UN PARTEAGUAS EN SU VIDA

Declarado fan de los Yanquis de Nueva York, al jugador quien porta el 91 en los dorsales con la tribu en el circuito estatal, le llegó el momento que cambió su vida dentro y fuera de los diamantes, en el que estampó su firma con la organización de los Tigres de Detroit, un 10 de enero de 2018.

En su andar por las sucursales bengalíes, el ex integrante de Indios de la UACJ en la Liga Gregorio ‘Goyito’ Rentería y de Bravos, en Primera Fuerza, en la pelota local, aprendió muchas cosas, enfrentó la barrera del idioma inglés y creció tanto en la faceta de persona como de deportista.

“Aprendí demasiadas cosas, ya sea del pitcheo, entrenamiento. Me enseñó hasta en lo personal, de tener una disciplina, tener una rutina diaria, me ayudó bastante. Fuera del terreno a saberme comportar, con la gente, con los fans, todo eso no lo enseñaron”, expresó.

El constante ir y venir, el ajetreo por diversas ciudades de la Unión Americana y por las sucursales felinas, con las que llegó hasta a Clase Triple A, a un escalón del ‘Big Show’ le dio igualmente al pitcher juarense la posibilidad de conocer una ciudad que jamás pensó que podría visitar: Nueva York, la llamada ‘Gran Manzana’.

“Fue una ciudad que jamás pensé poder conocer y gracias a Dios se me dio la oportunidad de jugar la final de Doble A contra la sucursal de Yanquis, la ciudad estaba a veinte minutos y pude ir -sonrisas-”, señaló.

Además, ser parte de las sucursales de la organización felina le permitió conocer y convivir con beisbolistas de la talla del venezolano Miguel Cabrera, futuro integrante del Salón de la Fama del Beisbol, en Cooperstown, Nueva York.

“Conviví con Miguel Cabrera, con ‘Javi’ -Javier- Báez, con Eduardo Rodríguez, varios peloteros que tienen más de 10 años jugando en Grandes Ligas y leyendas como Miguel Cabrera”, expuso.

TÍTULO CON INDIOS Y GRANDES LIGAS, ASIGNATURAS PENDIENTES

Tras 22 años de diamante recorrido en diferentes ciudades, países, equipos y niveles de beisbol, el serpentinero local tiene al menos un par de asignaturas por cumplir en el deporte rey: ser campeón estatal con Indios de Ciudad Juárez y jugar en Grandes Ligas, por lo que no está satisfecho.

“No, satisfecho no. En lo personal, creo que no he terminado mi etapa, sigo en busca de lo que siempre he querido, que es jugar en Grandes Ligas; espero y primero Dios jugar -en- invierno -en la Liga Mexicana del Pacífico- para buscar otra vez la oportunidad para Estados Unidos”, expuso.

Por ello, comentó que su agente envía correos a distintos equipos del circuito invernal con la idea de encontrar acomodo en alguno de ellos.

“Mi agente me ha estado diciendo que han estado ahí interesados, que ha estado mandando correos a los equipos, pero me quieren ver jugar en invierno para tomar una decisión”, expuso.

Antes de ello, Darío tiene muy en claro que debe cumplir con Indios de Ciudad Juárez, el equipo de su ciudad natal y con el que quiere levantar el trofeo estatal.

Ello, luego de la molestia y frustración que, a distancia, desde los Estados Unidos, le han causado los reveses que la tribu ha sufrido en la postemporada en el pasado reciente, ya sea en batallas por el título o en alguna fase del playoff.

“Soy de Juárez. Aunque años anteriores no estaba aquí, como juarense me dolía que todo el tiempo llegaban en primer lugar y en primera ronda se iban”, expresó.

Darío, quien regresa a esta ciudad después de siete años de ausencia comentó que pese a que las cosas no se les han dado a los Indios en la fase regular de la presente temporada, la historia será muy distinta en playoffs.

“Siento que este año va a ser diferente, este año vamos por mucho más. Tenemos bastante equipo, para mí, en lo personal, en pitcheo y bateo somos el mejor equipo del estatal. No se nos han dado las cosas, pero ya en playoff, primero y Dios van a saber de qué estamos hechos”, anticipó.

El lanzador, quien el año anterior militó con los West Michigan Whitecaps, en Clase A+ compiló en en general un récord de 6-13 en ganados y perdidos, 10 salvamentos, 175 ponches, 101 juegos, 158.0 innings lanzados y una efectividad de 4.67 en carreras limpias admitidas en sucursales de los Tigres.

SÓLO TRES TIROS

“Por parte de mi papá toda mi familia está ‘bañada’ en beisbol, es de Parral y todos los Gardea de allá de Parral son una dinastía beisbolera. Se puede decir que todos los Gardea de allá son parientes”.

“Desde pequeño, en la casa, puro beisbol, puro beisbol y toda la semana nos manteníamos en las ligas, jugando, entrenando, todo el tiempo era puro beisbol”.

“Todas las tardes con mi papá, ponernos a ver los juegos de los Yanquis, de Boston, de los Dodgers, de todas las tardes”

GARDEA ACOSTA EN DATOS

Nombre: Darío Emmanuel Gardea Acosta

Fecha y lugar nac: 29 enero 1999. Cd. Juárez, Chih.

Edad: 25 años

Estatura: 1.90 metros

Peso: 100 kilogramos

Trayectoria:

Inició en la Liga Infantil Basaseachic donde participó en las categorías Escuelita y Moyote.

Pasó a la Liga Niños Héroes donde jugó en las categorías Moyote e Infantil.

Como juvenil jugó con los Indios de la UACJ en la Liga Gregorio ‘Goyito’ Rentería y, con Bravos en Primera Fuerza

Medallista de bronce en la Olimpiada Nacional 2013 con los Doraditos de Chihuahua

Firmado por los Rojos del Águila de Veracruz, estuvo en República Dominicana en una de las academias de Grandes Ligas en ese país, en 2015

Representó a México en el Campeonato Mundial Sub-18, en Thunder Bay, Canadá, en 2017

El 10 de enero de 2018 firmó un contrato de ligas menores con los Tigres de Detroit, organización con la que jugó en sucursales

Jugó con Indios de Ciudad Juárez en el Campeonato Estatal 2018, cuando vio acción en dos series en el equipo que dirigió Marcelo ‘Pescador’ Juárez.